Reflexiones, actualidad y crítica, historia y curiosidades

martes, 10 de junio de 2014

REDES ANTI-SOCIALES

¡Hola de nuevo a todos! Primero quiero dar las gracias  a Sergio por enseñarme un vídeo ya que ha sido lo que me ha motivado a hablar sobre este tema.
Aquí tenéis el vídeo:



Vivimos en el mundo de la tecnología. Es irrebatible que necesitamos de la tecnología para todo. En realidad el ser humano siempre ha utilizado de la tecnología para su propio beneficio, como desde la rueda hasta la electricidad. Pero la sociedad ha ido sufriendo un cambio vertiginoso con la aparición de la informática; ordenadores, redes sociales, teléfonos móviles, etc. Bueno, en realidad ahora los teléfonos móviles se llaman smartphone, que traducido al inglés sería algo así como “teléfono inteligente”, aunque el concepto de smart no se refiere a una inteligencia positiva si no que es un término despectivo y peyorativo, más bien como si significará sabelotodo. Así que la traducción correcta sería teléfono sabelotodo. Ahí tenéis, como dato curioso.
Muchos de los que me estén leyendo seguro que nada más despertarse, sin haberse levantado todavía de la cama, cogen su smartphone y comienzan a mirar Facebook, Twitter o la red social que sea. También mientras desayunamos. Incluso si te despiertas en mitad de la noche y no consigues dormir vuelves a coger el móvil para no aburrirte, que encima el fogonazo de luz que sale de la pantalla aun te despierta más. Y el resto del día continuamos mirando todas las distintas redes sociales en las que estemos.
Ya es tremendo que además tengamos en nuestros perfiles, como en Facebook, a más “amigos” de los que tenemos en realidad. Me desconcierta la gente que se afana por conseguir más y más “amigos” y que cuando llega a la cifra que quiere te lo restriega por la cara. Sinceramente lo que pienso es que vaya vida tiene esa persona si necesita la aprobación de mucha gente que en realidad, muchas veces, apenas conoce. Además a mí que más me da que tengas tantos “amigos” en Facebook , por ejemplo, si ha muchos no les has visto nunca o cuando los ves por la calle ni les saludas.

Por esto las redes sociales me parecen más bien redes anti-sociales. Desde luego que nos ayudan mucho y nos facilitan la vida. Es muy útil comunicarte mediante el Whatsapp, para preguntar alguna duda sobre algo o para quedar con alguien. Pero sustituir una pantalla por unas cervezas con unos amigos en un bar es uno de los grandes fallos de esta sociedad. Si abusamos de la tecnología lo único que hace es dificultarnos la existencia y es que el ser humano tiene la increíble facultad de complicarse la vida.
Además, aunque somos seres sociales, también nos hace falta tiempo para nosotros mismo. Necesitamos de esos momentos íntimos y privados para descansar y reflexionar, momentos que nos permitan evadirnos del mundo para poder volver a él.

Por otro lado seamos sinceros, ¿nos importa realmente lo que haga absolutamente toda la gente que conocemos? Solo nos importa saber de unas pocas personas de las que conocemos. Sin embargo ahora sabemos que es lo que hace cualquier persona, aunque ni si quiera la conozcamos. Con meternos al perfil de una de sus redes sociales podemos saber donde vive, a quién conoce, qué estudia o dónde trabaja, si le gusta lo uno o lo otro, incluso lo que ha comido hoy si ha subido una fotito a Instagram.
Muchas de las publicaciones que hacemos, y no nos damos cuenta, son realmente absurdas. A quien le importa ver la fotografía de lo que ha comido hoy fulanito o cualquier otra cosa sin interés. Aunque el verdadero problema no es este. La sociedad se ha abierto totalmente y hoy en día nuestra privacidad se vende muchas veces, mientras que nosotros la regalamos a quien quiera verla, a empresas para, por ejemplo, conseguir realizar una mejor campaña de publicidad, y es que vivimos en la era de la información y ahora la información es más valiosa que cualquier otra cosa.


Tal vez la causa de nuestra necesidad a estar conectado constantemente es que no queremos sentirnos solos. Sentimos el apuro de estar constantemente rodeados de personas y esto no es malo. El ser humano siempre ha necesitado de otros para vivir. Pero quien piense que con una conversación por whatsapp o con las fotos subidas a Facebook o Instrgram no está solo que mire a su alrededor y vea si la soledad se cura por  la luz de una pantalla o con la compañía de nuestros amigos y seres queridos, el poder hablar uno enfrente del otro y vernos la cara, los ojos, nuestras emociones y nuestras sonrisas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario