CON GANAS DE TRABAJAR Y SIN TRABAJO

El paro es, en mi opinión, uno de los mayores problemas que puede asolar a una nación y sobre todo en la actualidad por dos motivos. El primero, porque la crisis ha disparado la cantidad de personas desempleadas y por ello es un grave problema hoy en día y especialmente en España. El segundo motivo porque es uno de los derechos más importantes ya que permite el sostenimiento de otros derechos. Necesitamos trabajar para vivir, es tan sencillo como esto. Un salario permite la protección de otros derechos tales como el derecho a una vivienda digna, a ropa y alimento (y por tanto también a la vida e integridad física), derecho a disfrutar nuestro tiempo libre, e incluso nos permite desarrollar nuestra personalidad y adquirir conocimientos, además de ser un factor sociabilizador importante e incluso nos permitiría formar una familia (pocos se van a animar a hacer crecer su familia con escasas posibilidades económicas)

Ya llevamos varios meses viendo en los telediarios y periódicos datos positivos en cuanto al empleo que parece ser que sube a su ritmo, sin pausa pero sin prisa. Vete tú a saber si será gracias a las medidas llevadas a cabo por los distintos organismos políticos o simplemente un aire fresco que sopla por casualidad (cada cual pensará una cosa u otra dependiendo de qué pie cojee políticamente hablando). Pero dentro de estos datos, que nos alivian en parte, deben observarse más de cerca para ver si las cosas van como deberían ir.

En mi caso he estado por aquí y por allá para buscar algún trabajo para este verano y me estoy empezando a dar cuenta de lo difícil que es encontrar un empleo ahora.

Pero si nos queremos basar en datos la semana pasada leí una noticia que afirmaba que el paro de larga duración se aumentaba drásticamente. El 23% de los parados registrados en 2013 llevaban tres años o más desempleados. Tampoco hay que olvidar que el empleo de jóvenes sigue dejando muchísimo que desear. Puede que sea este los dos frentes que primero habría que acometer en cuanto al desempleo. ¿Cómo se va a sostener un país si más de un millón de personas no encuentran un empleo desde hace 3 años o más? Por no hablar ya del “envejecimiento del empleo”, por así decirlo. Un mercado laboral que no admite jóvenes, por falta de experiencia por ejemplo (es normal que no tengan o tengamos experiencia, apenas acabamos de terminar nuestra formación, pero tenemos mucho más que ofrecer), es un mercado destinado a morir.

Yo soy de los que piensa que este problema se puede atajar de muchas maneras y que importa poco que las medidas sean políticas de derechas o de izquierda. Lo que necesitamos son personas capaces de darle la vuelta a esta situación más allá de confrontamientos ideológicos.

Según parece uno de los mayores inconvenientes de los jóvenes y parados de larga duración para encontrar un empleo es la formación, y más hoy en día donde necesitas un título prácticamente para desempeñar cualquier trabajo. En la actualidad él que se queda con el graduado básico le va a ser prácticamente imposible encontrar un trabajo. Pero es que no solo basta con que tengamos nuestra FP o nuestra carrera, también necesitamos diferenciarnos de los demás y el mejor método para ello es especializarnos o los idiomas, sobre todo en la aldea global que nos toca vivir. Lo que quiero decir es que no hay que parar, que no es suficiente con hacer la ESO, que tenemos que seguir estudiando y formarnos, a veces es incluso continuar estudiando mientras trabajamos.

Fuera de que la educación académica pueda ser uno de los aspectos más importantes para una sociedad, no solo para el trabajo, es también un factor esencial la “educación social” (tal vez exista un término más correcto para este concepto). Me refiero a la capacidad de las personas de afrontar los problemas y sobreponerse a ellos, a ser independiente o a saber cuándo depender de los demás y ser ayudado, a ser una persona respetuosa pero que sabe cuándo debe luchar. Tal vez sea este uno de los grandes problemas de España, esta “educación social”.

Hace unos cuantos meses ya salieron las cifras sobre el informe PISA (un informe que trata de comparar resultados educativos entre distintos Estados) en el que España sacó malos datos. No consistía en aplicar lo aprendido en la escuela sino en aprovechar lo aprendido en la vida. A esto es a lo que me refiero a que España tiene un problema en cuanto a la “educación social”.

Para acabar os voy a contar una anécdota que comentó un profesor mío en clase hace unos días. Decía que quería saber por qué en algunos países, como  Finlandia, obtenían resultados académicos tan altos, tanto a nivel internacional como nacional. Mientras que España, bueno, digamos que hacía lo que podía.

A lo mejor alguno piensa que es normal que en Finlandia saquen mejores datos que España, solo hay que mirar la inversión realizada en la educación. A los que dicen eso yo os digo que el dinero es necesario aprovecharlo muy bien para que dé frutos de verdad.

Finalmente mi profesor encontró la respuesta en un documental y dijo algo parecido a esto. En Finlandia los niños van a clase y tras caminar por la helada tundra durante media hora llegan a casa, encienden el fuego y ven la televisión. Cuando pasan los 30 minutos de televisión, sin que nadie les diga nada, se ponen a hacer los deberes. Todo esto mientras sus padres aun no han llegado a casa. Mientras que en España (según dijo mi profesor) “una alumna de 23 años vino a reclamarme una segunda corrección de un examen junto a su padre”. Esto es lo que quiero dar a entender cuando digo que en España falta “educación social”.

¿Qué opináis del tema? ¿Pensáis que guarda relación esta “educación social” con el empleo u opináis algo diferente?